Querida amiga Elena.
Sé que me fui hace
ya casi un mes y no te he dicho nada ni por un simple Whatsapp. Lo siento pero
desde que llegué, de las veinticuatro horas que tiene el día solo tengo 20
minutos escasos de tiempo libre, los cuales utilizo para poder descansar un
breve instante.
Respecto a mí, estoy mejor que siempre. Dime Elena, ¿Cómo no
pude venir antes a este lugar? Este viaje para mí está siendo una maravilla, es
como un sueño para alguien tan interesado en la inteligencia artificial como
yo.
Hoy por fin he podido escribirte, bueno, tengo que reconocer
que lo hago por una parte por obligación para que sepas de mí y porque el otro día
me descubrieron la historia de un Catedrático de inteligencia artificial
del cual quedé totalmente prendada.
De verdad Elena que no te puedes llegar a imaginar lo
interesante y apasionante que me pareció la conferencia que dio este hombre, en
la universidad en la cual estoy. Sé que te vas a quedar con las ganas de que te
cuente más, pero como es una larga historia quiero, y voy a contártela posiblemente
en el siguiente correo electrónico.
Aun así para que este mensaje no se te haga breve y aburrido
te voy a contar un poco por encima lo que me trae tan ocupada últimamente.
El día que llegué no fue del todo guay ya que al aterrizar de noche pues no hice más que irme a mi
hotel y dejarme caer muerta de sueño en la cama. Al día siguiente empecé con
las clases teóricas, las cuales eran un aburrimiento porque no conocía a nadie por lo tanto no podía hacer lo que más me gusta a mi, es decir hablar.
Ahora por lo menos tengo algunos amigos y amigas con los que poder conversary
conseguir disipar un poco el aburrimiento causado por las malditas clases. Pero
bueno no todo es malo y aburrido, también están las clases prácticas en las
cuales me lo paso genial. Vamos a una sala gigante en la que hay todo tipo de
material (incluidos los ordenadores) con los que podemos inventar y crear
prototipos de nuevos proyectos, y que los mejores quizá puedan a llegar a
hacerse realidad. Todo eso me ocupa la mañana y por la tarde suelo pasar largas
horas después de comer, en el taller mejorando la tecnología de mi proyecto,
también hay días en los que voy a conferencias de profesores y expertos en la
materia los cuales nos explican sus experiencias propias y tengo que reconocer
que me encantan este tipo de charlas.
Bueno, me acabo de dar cuenta de que tengo cosas que hacer y
tengo que dejarte por hoy. Un beso y hasta pronto.
Carla Díez.